13.07.2011 | |
¡Asustaron con la vaina vacía para “mañanear” al gobierno! Para oilwatch al solicitar un nuevo Estudio Impacto Ambiental (EIA) “se patea el balón par adelante” y en primera instancia se desmarca de la presión con la que empresa Mallon Óil quiso doblar el brazo al gobierno a punta de amenazas y números alegres sin ningún sustento. El gobierno parece empezar a entender que al declararse inconstitucional el artículo 41 de protección ambiental de la Ley de Hidrocarburos es necesario la presentación de un verdadero e integral EIA en forma previa al otorgamiento de la concesión y firma del contrato. No en la forma en que Mallon quería de firmar el contrato y posteriormente completar el EIA. Esto nos hubiera dejado en una verdadera inseguridad jurídica si posteriormente se rechaza el Estudio de Impacto Ambiental como paso en el caso Harken que tiene demandado al Estado en un juicio contencioso administrativo.Para le ecologista Mauricio Alvarez “Si bien se ve que el gobierno empieza a estudiar el expediente sigue habiendo mucha confusión sobre el asunto legal del caso. Se nos da la razón en el sentido que no hay un verdadero e integral EIA eso iba ser insostenible en un Tribunal pues habían criterios técnico de peso de las instancias estatales especializadas”. La SETENA tiene potestad y herramientas– con ayuda de universidades y científicos, la Comisión Mixta de apoyo a SETENA– para solicitar un Estudio Integral como lo demanda la Ley de Biodiversidad, se desprende de las resoluciones de la Sala Cuarta en relación al tema y en la misma resolución que declaro no viable ambientalmente el EIA de Harken. La SETENA ya declaró en 2002 no viable la exploración petrolera en el Caribe Costarricense en la resolución (Nº 0146-2002-SETENA)del “Proyecto Perforación de Pozo Exploratorio Petrolero” en el considerando 4 asegura que la definición de la Evaluación de Impacto Ambiental el artículo 17 la Ley Orgánica del Ambiente “hace suponer que toda actividad humana deberá ser valorada previamente de manera integral siendo que, en el caso concreto, no se ha dado precisamente esta situación”. Después continua asegurando en el considerando 5 que “El inciso anterior se puede afirmar debido a que no se ha presentado en la SETENA un Estudio de Impacto Ambiental integral, tal como lo indica la Ley de Biodiversidad, Ley 7788 del 30 de abril de 1998, en el artículo 94, el cual dice: Etapas de la evaluación del impacto ambiental. La evaluación del impacto ambiental en materia de biodiversidad debe efectuarse en su totalidad, aun cuando el proyecto esté programado para realizarse por etapas. Esto nos lleva a que no es del todo cierta la afirmación de la cláusula 2.4 del Contrato de Concesión de que se cuenta con aprobación del Estudio de Impacto Ambiental, pues lo que cuenta con aprobación es única y exclusivamente el Estudio Geofísico de Reflexión Sísmica Marina.” Así como los dos anteriores gobiernos-el actual- no tiene ninguna obligación de firmar un contrato para la exploración y explotación petrolera con Mallon Oil. Tampoco tiene porque buscar una salida alternativa como lo es la de convencer a la empresa de que se dedique a la búsqueda de gas (hay claros intereses para que así sea). Lo que puede hacer el Gobierno es apoyar la aprobación del proyecto de ley que propone la Derogatoria de la Ley de Hidrocarburos, interesadamente aprobada en 1994. Puede el Gobierno estudiar si cabe alguna indemnización a la empresa por la inversión de buena fe que logren demostrar. El gobierno no puede ser tan ingenuo de creer que la simple expectativa de derecho que tiene Mallon Oil pueda llevar al país a un tribunal internacional. Más Información con: Mauricio Álvarez, facilitador de Oilwatch Mesoamérica, www.oilwatchmesoamerica.org |
Fuente: Oilwatch Mesoamerica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario