2 de noviembre de 2010

Andrés y David frente a Goliat


Escrito por Redacción
Martes 02 de Noviembre de 2010 19:29
Nora Garita

Ver una gota de agua en un microscopio es una experiencia inolvidable: se percibe la vida como nunca la habíamos imaginado. A veces basta con detenerse ante una fila de hormigas que cargan hojas más grandes que sus cuerpos, o escuchar el canto del pájaro llamado “Cristo fue”, a las cinco de la mañana. Son instantes en los que nos sentimos parte del planeta tierra y admiramos el hecho de estar vivos y de que exista la vida en todas sus manifestaciones. Todo eso lo he aprendido de mi hija.

Mi generación fue un poco antropocéntrica, pensamos mucho en la justicia para los seres humanos pero nos faltaba esa conciencia de amor al planeta. La sensibilidad por la belleza de la Naturaleza era mérito de poetas. Fue Pablo Neruda quien nos hizo mirar la castaña en el suelo, quien llamó a la manzana “mejilla arrebolada de la aurora”, quien decía: “la col/se dedicó/ a probarse faldas/el orégano/ a perfumar el mundo/ y la dulce/alcachofa/ allí en el huerto/ vestida de guerrero”... O el poeta Oliverio Girondo que decía: “gracias a lo que nace,/ a lo que muere,/ a las uñas/ las alas/ las hormigas...”

Los jóvenes de hoy nos han mostrado la maravilla de las flores, las ranas, los insectos. Nos alertan sobre el calentamiento planetario, sobre la destrucción que hemos producido. Son los guardianes de la vida.

Los jóvenes de hoy se horrorizan de que un proyecto minero a cielo abierto dañe almendros, lapas, contamine el manto acuífero. Convencidos de que es cínico decretar de “convivencia nacional” el proyecto Crucitas, un grupo de ellos han hecho huelga de hambre. Este fue un método de lucha no violenta que empleó Gandhi para resistir el poder británico. El poeta Rabindranath Tagore lo llamó “Mahatma Gandhi”, es decir, “gran alma” Gandhi. Esos muchachos y muchachas que hicieron huelga de hambre han tratado de lanzar con ese método un grito desesperado a las conciencias de la gente de este país y lo han logrado. Si no han logrado anular la declaratoria de “interés nacional “ ya lograron alertar al país entero de la gravedad del asunto. Su misión está cumplida. He escuchado decir que no se puede anular el decreto pues eso le costaría al país mucho dinero. Dinero versus vida. Lo que es digno de pensarse es la pésima calidad del estudio ambiental que permitió semejante proyecto y medir sus consecuencias. Lo que debe cuestionarse también es por qué debe el país indemnizar a empresas cuando estas hacen algún daño (¡o prestarles puentes!).

Se mantuvieron en huelga de hambre David y Andrés, almas grandes. Pero sería un contrasentido que este llamado por la vida terminase con una muerte. Para clamar por la vida, los necesitamos con vida.

Hoy martes habrá un festival artístico junto a ellos. Debería ser una fiesta de fin de la huelga, ya se llegó al límite, y ese límite es infranqueable. Para que su llamado no sea un contrasentido, los queremos vivos. Andrés y David: la misión está cumplida.

Fuente: Página Abierta.

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